El Puma a diferencia de los Jaguares que atacan a los cazadores y a los perros que los persiguen, los Pumas trepan a los árboles o se esconden entre la maleza, esto hace más fácil para los cazadores encontrarlos y terminar con su vida.
En la época prehispánica se creía que matar un puma era de mala suerte. Sin embargo, con la llegada de los españoles y el cristianismo, estas creencias dejaron de existir y se le empezó a perseguir y matar indiscriminadamente, incluso los indígenas empezaron a matarlo.